martes, 19 de marzo de 2013

'Las Eras del Lejío' de Valle de la Serena son declaradas Bien de Interés Cultural

*** El conjunto está formado por un total de 25 eras empedradas, junto a otras sin empedrar, destinados al trillo de las mieses
Imagen de una de las eras que rodean la localidad.|HOY

La Junta de Extremadura ha declarado como Bien de Interés Cultural, con categoría de Lugar de Interés Etnológico, a 'Las Eras del Lejío' de la localidad pacense de Valle de la Serena, según publica hoy el Diario Oficial de Extremadura (DOE).
Las 'Eras del Lejío' son espacios destinados al trillo de las mieses, mediante el desgrane de las espigas y la separación posterior de los cereales de la paja por lo que son un importante testimonio etnológico, fundamental a la hora de comprender la vida de las poblaciones cerealistas, según el Ejecutivo extremeño.
La zona en la que se ubican tanto el Bien de Interés Cultural objeto de protección como su entorno se localizan a la salida de la población, en la margen oriental de la carretera EX-345.
El conjunto está formado por un total de 25 eras empedradas junto a otras sin empedrar, así como otros espacios anejos.
Estas eras siempre buscaban la disposición horizontal, con la intención de evitar que los granos se fueran desplazando. Por este motivo gran parte de las 'Eras del Lejío' están construidas sobre
bancales o terrazas de mampostería que salvan las diferencias de nivel.
Existe además una gran tipología de empedrados, según la diferente planta de cada era.
Así, pueden ser de forma circular, semicircular, cuadrada, rectangular o irregular.
En estos empedrados se da incluso la circunstancia de que varios de ellos se inician de forma centralizada o radial desde elementos de interés arqueológico como molinos de mano romanos.
Ello las dota de mayor importancia aún, entroncándolas con las culturas históricas que poblaron estas tierras, al establecerse una continuidad mediante el uso de estas piezas arqueológicas, de la misma raigambre agrícola y cerealista.
El origen histórico de este Bien se remonta a la Orden de Alcántara y al maestre Pedro Yáñez, quien otorgó carta de poblamiento a Zalamea y a los lugares de Higuera y El Valle, dotando a estas poblaciones de espacios para el pastoreo, la siembra y otras labores agrícolas.
Y aunque en tal concesión no se refieren límites ni denominaciones, las mismas ya aparecerán en la dotación de tierras que el emperador Carlos I realiza a todos los pueblos de La Serena en 1527, concesiones confirmadas a estos tres pueblos en 1538 por el mismo emperador.
En este mismo espacio de ejido se construyó el Cementerio Viejo en 1868, El Pocito (en un popular manantial de agua) y el Depósito de Aguas del Buen Cristiano.
Efe