jueves, 20 de octubre de 2011

PSOE y PP abochornan a Extremadura con su lista de primos y sobrinos enchufados

Alberto Mendoza El Confidencial
 
PSOE y PP han entrado esta semana en una “espiral diabólica” de denuncias sobre enchufismo en Extremadura que ha acabado por mostrar las peores prácticas de colocación de familiares en el Gobierno autonómico. El ex presidente Guillermo Fernández Vara, que todavía no ha digerido que los populares le desalojaran del poder con el apoyo de IU, fue el primero en abrir la caja de Pandora. Después de que desvelara en su blog una veintena de casos de supuesto nepotismo, el Ejecutivo de José Antonio Monago contraatacó con otra batería de cargos socialistas con vínculos familiares en la Administración.
Cuñados, primos, sobrinos o parejas de altos responsables del actual y del anterior Gobierno extremeño son los protagonistas de esta guerra partidista. Algunos incluso se han ganado unas coplillas, como el presidente de la Asamblea, Fernando Manzano, quien denunció a la Policía unas rimas dedicadas a su primo publicadas en Twitter: “Al sobrino de mi tío / lo enchufo de chófer mío / y a los extremeños timo / a mi primo me lo arrimo…”.
La lista de colocaciones es tan extensa que no hace sino socavar la imagen de los políticos de la comunidad autónoma. Y es que hasta la fecha los enchufes formaban parte de los rumores, pero no se habían puesto negro sobre blanco con nombres y apellidos. Ante lo que el portavoz parlamentario del PP Luis Alfonso Hernández tachó de “espiral diabólica”, el consejero de Administración Pública, Pedro Nevado, salió el jueves en defensa del personal contratado junto a 50 altos cargos y trabajadores eventuales.
En una comparecencia de carácter solemne, el consejero exigió respeto para la “profesionalidad y dedicación” de los integrantes del nuevo Gobierno. “Algunas personas de las que están aquí cobran tres veces menos que en su anterior puesto de trabajo”, por lo que reclamó que “no se mancille su honor”. Pero mientras unos portavoces populares pedían zanjar la batalla antes de que dañara la imagen de todos los políticos de la región, otros continuaban atizando el fuego de la polémica.   
 “¿Es solo cosa de enchufe que el alcalde de Zalamea, su mujer y su prima trabajen juntos en la Mancomunidad?”, se preguntaron desde el PP de La Serena. La retahíla de enchufes denunciados por el PP prosigue: un primo de Vara, subdirector de hospital; un cuñado de la portavoz de este partido, Ascensión Murillo, chófer del Grupo Socialista; la nuera del ex vicepresidente de la Junta, gerente del Palacio de Congresos de Cáceres; o la esposa del ex portavoz socialista en la Asamblea, directora de la Escuela de Hostelería.
La lista de Fernández Vara
Pero la lista de Vara sobre el PP tampoco tiene desperdicio. La vicepresidenta de la Asamblea, Consuelo Rodríguez Píriz, ha elegido a su sobrino para que sea su chófer; la número dos de Monago, Cristina Teniente, ha incluido en su gabinete de prensa a la hija del director general de Atención a la Dependencia; el nuevo responsable de enfermería en el área sanitaria de Mérida es cuñado de la consejera de Cultura; y el ex presidente del Senado Juan Ignacio Barrero ha visto cómo su sobrina se convertía en subdirectora de Salud Mental y Recursos Sociosanitarios.
Y mientras se libra la batalla de los enchufes, el cambio de color político en la Junta sigue provocando sobresaltos. Según averiguó El Confidencial, Vara ocultó una factura de más de 500.000 euros por una web oficial que presentó antes de las elecciones asegurando que no había “costado un euro” a los extremeños. El Gobierno extremeño confirmó el viernes que no renovaría el portal ‘opinaextremadura.es’, actualmente fuera de servicio, porque supondría un gasto extra de 173.975 euros a las arcas públicas.
El Confidencial